Chained Echoes Análisis – Un juego JRPG a lo clásico de los 90
Acaba de llegar Chained Echoes para Xbox One, PlayStation 4, Nintendo Switch y ordenador. Este es un juego desarrollado por Matthias Linda y la edición la ha hecho Deck13. Si te gustan los JRPG clásicos al estilo de Final Fantasy VII o los de Super Nintendo, aquí vas a disfrutar. Y aunque contenga todos los elementos clásicos del género, también aporta su innovación. Sin duda este es un juego divertido para los que gustan del rol por turnos.
Este Chained Echoes se inspira en la edad de oro del género JRPG. Al jugarlo, verás reflejados juegos como los Final Fantasy o los Chrono Trigger. El estilo es ese y su profundidad es bastante interesante. Aquí no te va a valer de nada usar ataques y ataques sin más. Necesitarás usar una estrategia para acabar con tus rivales. De hecho, el juego te avisa que no va a ser sencillo avanzar.
En Chained Echoes vas a poder conocer a varios personajes. Esto está tomado de otros juegos del estilo en donde no hay un solo protagonista. Al inicio encarnarás a Glenn. Este es un piloto de armaduras del cielo que es contratado por Kylian. Con el deberás ir a una misión para conseguir un cristal. También tomarás el papel de la Princesa Lenne o un escritor llamado Ser Victor. Variedad de personajes y motivaciones en este puzle de tramas.
Chained Echoes nos trae la esencia clásica
A medida que vas avanzando, van entrelazándose las historias de Chained Echoes. Al principio no habrá mucha conexión pero en poco tiempo estarás dentro de la historia. La narrativa es bastante buena. Está muy bien construida. De hecho, el desarrollador ha dedicado más de 7 años para realizar este juego. Se nota el mimo puesto en el guion. Hay giros muy buenos y los personajes están muy bien representados.
A nivel de jugabilidad nos encontramos ante un JRPG clásico. Es decir, un juego por turnos en el que podrás realizar una acción disponible. Podrás atacar o usar habilidades. El uso de habilidades gasta ciertos puntos. Pero también otorgan ataques más poderosos. El truco de Chained Echoes es saber cuál es la debilidad de cada enemigo. Suelen ser duros y hay que utilizar estrategias para acabar con ellos.
A medida que va pasando el juego vas consiguiendo puntos de grimorio. Con estos puntos vas subiendo las habilidades que quieras de cada personaje. Es decir, que tú eres el que va a ir creando la progresión de los protagonistas en Chained Echoes. Una de las cosas más interesantes del juego es que al inicio de cada pelea, tendrás los puntos de vida y de habilidades completos. No hará falta ir a curarte o recargar las habilidades antes de luchar. Esto es muy interesante.
Gran historia y divertida jugabilidad
Otro de los puntos innovadores de Chained Echoes es la barra de Overdrive. Es una barra que nos va a permitir potenciar ataques. Se va llenando o vaciando a medida que hacemos ataques. Al inicio está abajo y debemos mantenerla en el nivel verde. Nos permitirá hacer más daño y usar menos puntos de habilidad por golpe. Pero también podremos sobrecalentarla. Esto nos dejará en desventaja con los enemigos. Así que no es solo atacar, es mantener la barra en un nivel verde y estable.
Esto le da mucha profundidad al juego y nos hace tener que echar un vistazo a cada momento a la barra. No vale solo atacar en Chained Echoes porque esto limita nuestras acciones. Le añade una dificultad y un factor muy interesante al juego. A nivel gráfico Chained Echoes se inspira en los juegos de 16bits de Súper Nintendo. También a nivel sonoro. Nos ha gustado bastante su pixel art. Aunque hay que destacar que el juego viene en completo inglés sin traducción al español.
Chained Echoes es un título JRPG inspirado en los clásicos de antaño. Sí que añade algunas funciones novedosas con respecto a aquellos juegos. Lo vamos a pasar muy bien si nos gusta este género, ya que se está olvidando. El pixel art tiene mucha fuerza. Los personajes están muy bien escritos y la historia es muy interesante. Tiene mucha profundidad y tendrás que pensar. Un juego ideal de cara a dedicarle muchas horas.
Sobre el autor
- El ambiente clásico
- Dificultad algo alta